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miércoles, 17 de abril de 2024

Agilidad emocional. Tomar distancia. Día 2

 Agilidad emocional. Tomar distancia Día 2

La agilidad emocional es la capacidad de aceptar tus emociones y utilizarlas como información, en lugar de intentar cambiarlas. También puede significar crear distancia entre usted y sus emociones. Por ejemplo, en lugar de decir "Estoy estresado", puedes decir "Me siento estresado". Esto puede ayudarle a desarrollar una perspectiva más amplia y dar pasos hacia objetivos más constructivos.

Inteligencia emocional (o EQ) es el término utilizado para la capacidad de comprender, utilizar y gestionar sus propias emociones. La inferencia aquí es cambiar los patrones negativos por otros más positivos y utilizarlos para reducir el estrés, comunicarse mejor, aumentar la empatía y la resiliencia y reducir los conflictos: toda una lista de aplicaciones potenciales.

El énfasis está en las palabras para comprender y gestionar. Sin embargo, gestionar y mucho menos ser consciente de las miles de cosas que nos decimos a nosotros mismos y a otras personas a diario es una tarea desalentadora.

Los problemas aquí son tres:

  1. Hay un grado de enfoque y dedicación continuos en esto que significa que es algo que consume recursos mentales de manera continua.
  2. Se niega que los patrones y pensamientos negativos sean de alguna manera útiles, lo que significa que quienes siguen este camino se animan a verlos como cosas que deben cambiarse o eliminarse.
  3. Aumentar la sensibilidad intrapersonal e interpersonal es un objetivo digno. Aún así, cualquier fortaleza abusada se convierte en debilidad y un enfoque abrumador en las relaciones y en trabajar bien con los demás puede conducir a niveles más bajos de inconformidad y desafío.
También vale la pena considerar otro aspecto del desarrollo de esta capacidad en nosotros mismos y en los demás. Las personas con un coeficiente intelectual alto pueden sentir empatía y transmitir mensajes que "se sienten bien" a otras personas. Esto suele ser algo bueno, pero llevado al extremo puede convertirse en una capacidad de manipular a los demás. Tendemos a pensar en la inteligencia emocional como un rasgo positivo. Aun así, la gente puede utilizarlo para fines menos éticos además de los éticos.

Cada uno de nosotros es tanta sombra como luz. Cualquier persona sana tiene una corriente de pensamientos relacionados con la duda, la crítica, el miedo o la ansiedad que fluye a través de ella a medida que avanza en su vida. En 2014, un estudio realizado en Estados Unidos encontró que una persona promedio hablaba alrededor de 16.000 palabras por día (un poco más para las mujeres, un poco menos para los hombres). Y esas palabras son sólo las que exteriorizamos. Incontables más fluyen a través de nuestras mentes conscientes e inconscientes mientras estamos despiertos y dormidos, y el tono de esas palabras puede tener un impacto significativo en nosotros y en cómo vemos nuestras vidas.

Tratar las emociones como datos y analizarlas objetivamente para decidir si forman la base para una toma de decisiones acertada es un proceso hábil. Esta capacidad requiere el desarrollo de una visión de helicóptero de nuestro proceso mental interno, ya que es un desafío tratar las emociones de esta manera si actualmente estamos atrapados en ellas. Herramientas como la atención plena, la meditación, la reflexión o llevar un diario pueden ayudar con esto. Por lo que su uso sería un elemento imprescindible a tener en cuenta para cualquiera que desee desarrollar sus niveles de agilidad emocional.

Entonces, inteligencia emocional versus agilidad emocional. Ambos son importantes y tienen un lugar. Depende de usted decidir cuál prefiere.

Aquí les dejo el enlace para realizar esta meditación👇
https://drive.google.com/file/d/1cJUDE6qWCbJ1OeRSqVwdGxcb_fuwvMl9/view?usp=drive_link
















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