Decálogo para estar bien en clase
Las clases de yoga en grupo son una forma estupenda de encontrar la paz y el bienestar que necesitamos en nuestra rutina diaria, pero es necesario crear un buen clima entre todos para no perturbar a los demás.
Si todavía eres principiante en esta disciplina, te ayudará conocer y poner en práctica este decálogo que ya se conoce como las normas de etiqueta del yoga y que ayuda a construir el karma colectivo en la clase.
- Aparta los pensamientos negativos antes de entrar a clase. En momentos puntuales puede ayudarte escuchar alguna pieza musical relajante antes de comenzar tu practica.
- Sé puntual. Si llegas tarde a tu clase, el hecho de abrir la puerta y situarte en un lugar libre puede desconcentrar el resto de la clase y, además, tardarás más tiempo que tus compañeros en encontrar el clima adecuado que necesitas para incorporarte a los ejercicios.
- Si estás resfriado no vayas a clase. Tampoco si necesitas limpiar tu nariz constantemente o tienes mucha tos. Ten en cuenta que al realizar los ejercicios de respiración tus compañeros necesitan llenar sus pulmones y pueden sentirse incómodos rodeados de gérmenes.
- No invadas el espacio ajeno. Coloca tus objetos de primera necesidad, como una botella de agua o toalla, fuera del espacio que necesitan tus compañeros más cercanos para moverse.
- Ve al baño antes de entrar a clase. Si necesitas abandonar la habitación, no lo hagas nunca en medio de una postura o cuando tus compañeros se encuentren en pleno movimiento. Espera a que todos hayan terminado. Y si sabes que vas a tener que irte un poco antes, colócate cerca de la puerta.
- No te pongas perfume antes de ir a clase. El olor puede ser irritante para otros alumnos.
- Camina sólo sobre tu colchoneta. Procura no pisar la de los demás.
- Sé ordenado. Recoge con cuidado tus cosas después de la clase.
- Límpiate el sudor con una toalla que sea tuya, y ten la precaución de no dejarla cerca de la colchoneta del compañero cercano.
- Nada de móvil. Apágalo siempre antes de entrar a clase, o mejor, no lo lleves. Te ayudará a desconectarte del estrés mucho más.
Namasté
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